lunes, 3 de noviembre de 2008

La Verdadera Amistad

La amistad es el pilar de una relación. Es la base solida para estable- cer un acercamiento y reciprocidad de un nuevo camino en la vida.

Existe un proverbio muy lindo que dice “en todo tiempo ama al amigo y es como un hermano en tiempo de angustia”. G. Hebert dice: “Cuando una amigo nos pide algo la palabrea mañana no existe”. Churton Collins, la define: “En la prosperidad nuestros amigos nos conocen; en la adversidad nosotros conocemos a nuestros amigos”.

La amistad forma parte fundamental del trato al prójimo y el de nosotros mismos. La amistad verdadera es desinteresada no daña, no busca provecho propio, es más dar que recibir, es leal, sincera, llena de confianza, no hay intriga, ni envidia es dulzura y poesía.

Características de la Amistad
Correspondida. El afecto es mutuo, no se deja corromper por la envidia, no se enfría por las sospechas, crece en las dificultades, se comparten las alegrías y las penas.
Bienestar para el ser humano. Crea una armonía de sentimientos y gustos, dedicación del uno por el otro, hay identificación.
No se abandona en las dificultades. No se traicionan, no habla mal ni permite que hablen mal de su amigo, la defiende, le da animo, confianza, comprende, consuela.
Sendero natural y sencillo. Elimina obstáculos y dificultades, ser solidario.
Dar al amigo lo mejor que se posee. Seguridad, atención, interés, decir las cosas cuando están mal, desea lo mejor para la otra persona, se preocupa todos los días por el otro.

La amistad lleva a una verdadera y sana vida de confianza, camaradería y apoyo. Un ejemplo de buena amistad es Jesucristo: “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos”

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