domingo, 15 de marzo de 2009

Las Mascotas y la Salud Emocional de los Niños

Debido a que no es fácil instruir emocionalmente a los niños, tampoco se puede evitar que estén tristes, ansiosos, enojados, asustados y confundidos de vez en cuando. Las mascotas pueden ayudar a los niños a crecer tanto en lo social como en lo emocional, a su vez contribuyen a su desarrollo intelectual y físico es beneficioso emocional, socialmente que los niños de cualquier edad tengan una mascota, el niño tiene la capacidad de poder convertir esa mascota en un amigo, pero, es importante tener en cuenta la edad del niño para saber qué clase de mascota es recomendable tener.

La principal asociación de pediatras de Estados Unidos advirtió que los ni­ños pequeños no deben te­ner como mascotas a eri­zos, hámster, pollos, la­gartos pequeños ni tortu­gas debido a los riesgos de salud que representan. Los niños menores de 5 años a menudo besan a los animales, se llevan las manos a la boca después de tocarlos, por esta razón, los padres o familiares deben evitar estas mascotas en estas edades.

Las mas­cotas exóticas tienen más tendencia a morder y a arañar que perros y gatos, hay muchas evidencias de que esos animales por­tan gérmenes peligrosos, incluso mortales, lo que pone en peligro a niños meno­res de 5 años, según el re­porte de la Academia Ame­ricana de Pediatría.
Cada grupo de edades se beneficia de los animales de diferente manera.

Según las etapas de Erickson los niños que se encuentran en el estadio y las edades.

I Bebé (2-3 años) y II preescolar (4-6 años)
Desarrollo cognoscitivo: Los bebés se divierten de los aspectos sensoriales de los animales. Ven un perro bonito, escuchan el canto de pájaro y acarician la suavidad del gato. Los niños pequeños también pueden aprender los nombres y las formas de los diferentes animales, así como los ruidos que hace cada uno.
Desarrollo social/emocional: Cuando los niños empiezan a caminar intentan establecer vínculos emocionales con sus mascotas, y volverse su "amigos".
Desarrollo físico: Los niños preescolares se ejercitan haciendo actividades físicas cuando pasean o juegan con una mascota, dependiendo el tipo de mascota. Los gatos y los perros son más activos que los animales más pequeños. Los animales más pequeños pueden ayudar a los niños mayores a desarrollo sus destrezas motoras finas.

III Escolares (7-12 años)
Desarrollo social/emocional y físico: A medida que el niño crecen, aprenden más de su mascota, que le gusta jugar, cada cuanto le gusta estar activo, permitiendo así un vinculo más estrecho entre el niño y su mascota. Esto hace que el niño aprenda a adquirir responsabilidades ya que, debe estar pendiente y cuidar a su mascota. El cuidar a una mascota puede fomentar sentimientos de empatía. Asimismo, los niños en edad escolar observan cómo los animales reaccionan cuando reciben un trato afable.

IV Adolescencia (12-18 ó más años)
Desarrollo social/emocional:
El ayudar a cuidar a las mascotas da a los adolescentes sentimientos de pertenencia de responsabilidad. Por ejemplo, cuando se le da la responsabilidad de tener una mascota si la alimenta, asea el lugar y bañar a su mascota son tareas que debe hacer para que este bien su mascota y él como persona se siente importante y capaz de tener y cumplir retos.

Las mascotas pueden ayudar con la autoestima de los niños y adolescentes dándole una experiencia de amor incondicional. No importa lo que suceda en la escuela o con sus amigos, las mascotas siempre tratan a los niños de la misma manera.

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